jueves, 22 de marzo de 2012

Elegía a Mª Dolores Leal Flores, mi ahora difunta abuela

Adiós,
a tus ojos azules,
adiós,
a tu sonrisa duradera,
adiós
y con mucha dificultad
te digo,
que siempre estarás,
en el fondo de mi frágil corazón.

Que sólo tú me agradas,
me quieres y me abrazas,
¿y por qué no estás haciéndolo ahora mismo?
No lo quiero pensar.

Abuela, amiga,
compañera y,
sobre todo la
chispa que llenaba mi vida...
y que ahora ya no está.

Y así fue cómo mi frágil corazón
se rompió en el suelo,
y así me dejaste vacía...
para siempre.

Al menos sé,
que desde allí arriba,
en lo alto de este cielo azul,
con tu característica sonrisa...
me esperarás.

Marina Lara Sidera 1º ESO